06 Abr ¡1,2,3,…100! ¡100 gracias a todos y cada uno de los seguidores en Linkedin!
En cuestión de tamaños ya se sabe. Los centímetros no son importantes pero a muchos nos importan.
¿100?
Hoy estoy contento porqué parecía inalcanzable conseguir 100 seguidores en mi perfil de empresa de Linkedin sin pedir favores absolutamente a ningún contacto directo ni amigo o saludado.
Puedo decir con satisfacción que de estos 100 quien me sigue es porqué verdaderamente ha sentido que me quería seguir y nadie se ha sentido coaccionado ni con ningún tipo de obligación moral.
Resistir la tentación de invitar a amigos, conocidos y saludados
Durante algunos años he tenido una tienda online junto con un amigo. La tienda sigue operativa pero ya no es lo que llegó a vender online.
Podéis investigar mi perfil de Linkedin para saber de que se trata, aunque no es el fin de este escrito.
El caso es que en su momento me hacía tanta ilusión el proyecto y lo sentí tan mío que cometí el terrible error de invitar a todos en Facebook a ser fans de mi página de empresa.
Mucho ha cambiado todo porqué hoy ni siquiera uso Facebook (prácticamente).
Y la página de empresa está abandonada.
Es decir, di la paliza a todos mis amigos para que me siguieran y al final fue un esfuerzo estéril que únicamente servía para generar preguntas incómodas.
Hoy, puedo decir con orgullo que no cometí este error con mi propia marca personal.
Crecimiento orgánico
Vísteme despacio que tengo prisa.
Se trata de crecer poco a poco pero sostenido y constante en el tiempo.
Obviamente requiere esfuerzo y sacrificio, pero quién algo quiere algo le cuesta.
¡Hola!
Querido lector,
Muchas gracias por tus muestras de apoyo cuando comentas en mi blog, me escribes un email directo o las al botón de seguir en linkedin.
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