Algo que no suelen mostrar las cámaras en las grandes vueltas ciclistas es a los velocipedistas que se quedan rezagados persiguiendo al pelotón.
Realizan un esfuerzo loable por no descolgarse del grupo y poder así continuar en competición.
Las carreras suelen ser muy largas y quienes persisten lo terminan consiguiendo.
Durante todo este mes de agosto y quizás el verano entero esta es la sensación que tengo con mi reto del post diario.
Ha habido muchas noches en las que me he sentado delante el blog para decirme que lo mejor era abandonar.
No por ideas.
No por sueño.
El pelotón se iba demasiado lejos y veía como me retrasaba, 1, 2, … y hasta 5 escritos en mi objetivo.
Después me ponía al día y me volvía a quedar estancado.
¿Quizás en alguna ocasión hayas tirado la toalla aprendiendo un idioma?
¿Con tu reto de ponerte más fuerte que el mismísimo Putin?
¿O con la idea de aprender a tocar la guitarra online?
Siempre hay alguna razón por pequeña que sea.
Y entonces me decía que aunque no necesitaba demostrar nada a nadie mantener el hábito era importante.
—
Querido lector,
Cuando flaqueo de energía para proseguir esta es mi pequeña motivación.
¿cuál es la tuya?
Si te ha gustado este contenido, te animo a leerme mañana, como cada día, en https://francescricart.com/blog
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