La fiesta de la espuma

En la fiesta de la espuma primero me quedo en rinconcito para no mojarme.

Llega volando un trozo de espuma y como me impacta me acerco un poquito para quitarmela.

Y entonces ya no sabes como te terminas sumando a la fiesta y remojando como el que más.

Exactamente lo mismo que cuando alguien te dice:

– tengo un cliente de compromiso para ti, ¿me puedes ayudar?

Clientes de compromiso

A todos pasa alguna vez.

No sabes decir no y el compromiso termina siendo con la empresa que te ha recomendado.

Quieres contentar a todos pero en el fondo sabes que la culpa es tuya.

La palabra adecuada era NO y se te olvidó.

Todo ello no quita que a veces fuera lo correcto pero ŕecuerda que trabajar para familiares, amigos y/o compromisos en ocasiones acarrea ataduras innecesarias.

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Querido lector,

¿te has metido en un desaguisado que vieras venir pero no te pertocara?

Lo mejor es tener aguante y hacerlo mejor la próxima vez.

Una veces sale bien y otras no tanto.

¡Pero tarde o temprano siempre ganas algo!

Si te ha gustado este contenido nos leemos mañana como siempre con un nuevo escrito en el blog.