Querido lector, puede que la frase de este post ya esté muy trillada pero es que se trata de una verdad como un templo. Hoy se la oía comentar a Joan Boluda en su podcast del marketing online.
Así que la frase no es mía… pero ojalá me la hubieran dicho muy al principio cuando todavía era un autónomo amateur (ahora se lleva más la palabra freelance).
El tema es que cuando empecé en este mundillo todavía era muy tierno y siempre iba con el discurso del emprendedor novato. Que si yo no voy a cobrar mantenimientos, si sólo es retocar una cosita de nada no te lo voy a facturar… estas cosas que al principio te ayudan pero con el tiempo te vas dando cuenta que te restan credibilidad.
Con ello no quiero decir que a veces no lo haga. Pero lo hago para mis clientes, no para mis ventas.
Diferencia entre una venta y un cliente
Una venta es un proyecto que genera un ingreso puntual. Las ventas generalmente se terminan transformando en ladrones de tiempo.
Un cliente es en mi opinión una empresa que se preocupa por sus proveedores y entiende que para que a ella le vaya bien también lo tiene que ir para todo su círculo. Si consigues un cliente satisfecho entonces es muy probable que vas a tener ventas recurrentes.
Cuando empecé muchos años atrás no vendía mantenimientos. Con el tiempo me di cuenta que era un gran error.
Así que un día tomé la decisión de no trabajar para empresas con las que no veía una relación a medio plazo. Y todo empezó a irme mucho mejor.
Mantenimientos
En el mundo web la gente suele tener a priori desconfianza cuando oye la palabra mantenimiento.
Como en todas las profesiones hay personas que se aprovechan del desconocimiento de las empresas y no hacen todo lo que deberían. Que le vamos a hacer…
Pero la realidad es que cualquier página web termina necesitando un mantenimento tarde o temprano del mismo modo que a un vehículo hay que hacerles revisiones, cambiar el aceite y los neumáticos de vez en cuanto.
Como en todo, la clave está en la comunicación y la confianza que pueda haber con tu cliente.
Así que ya sabes… si consigues un mantenimiento habrás encontrado un tesoro. ¡Cuida y mima a tu cliente para que esté a gusto contigo y no se rompa la relación!Fotografía basada en Kelli Tungay en Unsplash
Deja una respuesta