22 Jul El hilo rojo, Platón y Pablo Coelho. ¿Qué tienen en común?
Me encanta la película de «El show de Truman».
Me siento identificado respecto a mi vida personal y mi carrera profesional.
Si unes los puntos clave…todo ha ido siempre muy enlazado.
Para los que no la hayáis visto no quiero hacer spoilers.
Básicamente es la vida de alguien que vive en un «Gran Hermano» y que un día empieza a cuestionarse el porqué de las cosas.
La película es la expresión moderna de el mito de la caverna de Platón.
Salvo que 2000 años más tarde.
¿Tendrá la valentía de salir del cascarón para explorar lo que de verdad hay allí fuera?

El hilo rojo
Hoy lo comentaba con alguien que considero es una persona muy interesante. Alguien sabio e inteligente.
Me ha hablado sobre el hilo rojo.
El hilo rojo es un mito japonés que explica que las personas estamos entrelazadas por una conexión tan fuerte que se puede enrollar, se puede doblegar pero que nunca se rompe. Nuestros destinos siempre terminan confluyendo con el hilo rojo de nuestros allegados. Son nuestras almas gemelas independientemente de la edad y de nuestra trayectoria.
Me ha hecho reflexionar.
Me encanta este hilo.
¿Volviendo al show de Truman nunca has tenido la sensación de que toda acción – reacción viene relacionada?
Tienes una devoción absoluta por correr una maratón y de golpe empiezas a encontrar personas a tu alrededor con la misma motivación que tu. Incluso alguien cercano descubres que lleva tanto tiempo como tu preparándola.
¿En que momento los caminos se entrelazaron?
El alquimista, de Paulo Cohelo
La fama de «El Alquimista» de Pablo Coelho es merecida.
De algún modo nos explica que el mundo conspira para que consigamos aquello por lo que trabajamos con tanto ahínco.
El camino es largo. Pero a menudo encontramos la solución en el punto de partida. Sólo hay que saber escuchar el lenguaje del mundo. (si habéis leído el libro entenderéis esta frase).
Pero atención. No caigamos en el mismo mensaje motivacional de siempre.
Hay que ser realistas. Querer es (casi) poder.
Aunque si es verdad que muchas veces el mundo parece conspirar a nuestro favor… de ahí el título que da nombre a esta publicación.
Querido lector,
¿Crees en el destino?
Yo no se que pensar. Unas veces si. Otras no. Hay realidades muy injustas.
Pero si es verdad que el trabajo constante y el esfuerzo siempre nos acercaran a nuestras metas.
Bien, ¡Hoy tocaba un tema un poco más filosófico!
¿Tienes algún sueño? Lucha por él. El premio es el camino.
Nos leemos mañana, como siempre, con un nuevo contenido en el blog.
Entradas relacionadas:
El gusanillo del emprendimiento me visitó una vez y me di cuenta que era ¡para toda la vida! ¿Que es lo que hace que algunos tengamos esta inquietud y otros no? En esta entrada te explico porqué no de...
Steve Jobs te diría que todas las mañanas te preguntes que harías hoy si fuese el último día de tu vida. Mientras lees estas líneas hoy ya es tarde. Pero te propongo que lo hagas mañana. ¿Eres feliz h...
El número 600 no tiene nada especial para los matemáticos. O no. El caso es que hoy estoy de celebración blogera. ¡Feliz cumpleblog!
Hay personas que necesitamos trabajar mucho para trabajar mejor. O mejor dicho, tener mucho trabajo. ¿Formas parte de este club?
¿Vives para trabajar o trabajas para vivir? Recientemente ha nacido mi segundo hijo y he decidido que necesito trabajar la generación de ingresos pasivos. ¿Tu te conformas con tu situación actual?
Papá, estoy hasta el moño de trabajar. Hoy creo que no voy a hacer nada... me voy a dormir. ¿Qué me ha respondido?
Anónimo
Posted at 16:45h, 22 julioInteresante entrada. interesante leyenda del hilo rojo. En cuanto al gran hermano, hay que leer 1984 de Orwell. Adelante!
El alquimista, empecé a leer-lo en inglés… Este verano lo acabo.
Gràcias!
Francesc Ricart
Posted at 19:46h, 22 julioHola!
Muchas gracias por tu comentario. Anotado queda 1984 en mi lista de tareas. Gracias a ti!
Valeria
Posted at 16:50h, 13 febreroSi ya has leído 1984 y te gustó me permito sugerirte «Un mundo perfecto» de Aldous Huxley. Con respecto a la pregunta de si creo en el destino, te digo que sí, creo que cada cosa que ocurre en nuestra vida tiene un por qué y un para que que nuestra mente racional no es capaz de procesar. Cada persona que conocemos va a aportarnos un aprendizaje, y siempre será positivo para nuestro espíritu, porque creo que estamos aquí para desarrollar nuestro verdadero ser, que viene con un «hardware» que llamamos cuerpo, un procesador/disco duro= cerebro, el «software» constituído por todos esos «programas» que nos inculcan desde bebés, que nos condicionan a comportarnos de cierto modo, a que nos gusten determinadas cosas, etc. ¿ Ydonde encaja el espíritu como tal?, bueno creo que esto es lo que nos diferencia de las máquinas, lo que nosotros tenemos y un ordenador no tendrá, al menos por el momento. Cuando se nos estropee el hardware seguiremos existiendo como otra forma de energía, nuestro espíritu pasará al siguiente nivel. Si creo en el destino, no existen casualidades si no «CAUSALIDADES». Me gusta tu blog.