Pablo se fumaba un paquete de cigarros al día y luego no le llegaba para final de mes.
Era consciente de que el tabaco lo iba a arruinar y a enfermar.
El ánimo ya lo tenía igualmente por los suelos así que decirle que dejara el vicio era demasiado poco persuasivo.
De modo que igual lo mejor hubiese sido darle razones para fumar mejor.
– Pablo, si te buscas un trabajo de verdad podrás dejar este tabaco asqueroso por otro más saboroso.
-Francesc, en cuanto pueda te aseguro que me pongo a buscar trabajo.
Pero nada, no había suerte.
Así que el otro día me puse a elaborar una lista de tareas que a menudo posponemos:
Mañana dejo de fumar.
Mañana dejo de beber.
Mañana me apunto al gimnasio.
Voy a empezar a escribir en el blog de mi empresa.
¿he oído bien? ¡voy a empezar a escribir en el blog de mi empresa!
Esta última me gusta porqué significa en primer lugar que se entiende la importancia de escribir para la página web del negocio. Y en segundo lugar porqué hay sentimiento de culpa pot no hacerlo.
Además, de todos los propósitos frustrados es el único que se puede externalizar.
—
Querido lector,
Si dejas para mañana tus escritos y aún así ves que no lo haces con la constancia necesaria, no lo pospongas más.
Si te ha gustado este contenido te animo a leer mañana, como cada día, un nuevo escrito en https://francescricart.com/blog
Deja una respuesta